En los últimos diez días hemos recibido a través de nuestros seguidores dos noticias sobre madres que habían sido expulsadas de un monumento y un local comercial por dar el pecho en público.
Antesdeayer @chu_liya nos pedía a través de twitter que difundiéramos que una madre de su grupo de lactancia había sido obligada a abandonar la Alhambra por dar el pecho a su bebé de 9 meses. Por la noche, vi la noticia en algún telediario y ayer, en El País.
Por otro lado, hace 10 días, Fernando Mateos, uno de los autores de #papiconcilia, compartía en nuestro muro de facebook otra noticia similar. Una madre sevillana fue expulsada de Primark por el mismo motivo.
No son dos casos aislados. Cuando recibí esta primera noticia, me documenté sobre el tema y encontré un mapa de España en el que la asociación Lactancia en libertad sitúa testimonios reales de madres incomodadas o expulsadas por dar el pecho en público.
Regulación para dar el pecho en público
Existe un vacío legal en España sobre dar el pecho en público. La única excepción es la nueva Carta de Derechos y Deberes de las personas en el Sistema Vasco de Salud (Osakidetza), aprobada recientemente por el Gobierno vasco, que reconoce como un derecho que se pueda amamantar a un bebé en cualquier espacio público de Euskadi.
La Ley de igualdad británica (2010) considera que prohibir la lactancia es una forma de discriminación hacia la mujer.
Por su parte, Estados Unidos aprobó una ley federal que protege a las madres lactantes pero que solo se aplica en las instalaciones del gobierno federal, por lo tanto no aplica en lugares de propiedad privada como restaurantes o tiendas.
El pasado mes de mayo el PSOE presentó una proposición no de ley para instar al Gobierno a tomar medidas para proteger la lactancia materna en espacios públicos y regular la existencia de salas de lactancia específicas en las empresas.
¿Qué problema hay en dar el pecho en público?
A muchas personas puede resultarles violento ver a una madre dando el pecho en público, por eso se les expulsa de estos lugares. Pero nadie se cuestiona lo violento que puede llegar a resultar para una madre tener que sacarse la teta en la calle por necesidad. Sí, por necesidad, porque su hijo tiene que comer.
Beatriz Cobo contaba en su testimonio incluido en el especial sobre lactancia materna de #mamiconcilia “ahora que el niño ya camina, tiene dientes y balbucea sus primeras palabras, nos empiezan a mirar raro. Yo misma siento más pudor al dar el pecho en público que cuando era recién nacido”.
A mí, que siempre me ha resultado un poco violento dar el pecho en público, mi madre, que por cierto es bastante pudorosa, me dice: “¿Qué problema hay? La Virgen María daba el pecho en cualquier sitio y ha quedado documentado en cuadros a lo largo de toda la Historia como se ha hecho siempre, con la mayor naturalidad”.
En enero de 2014, el Papa Francisco, animó en un bautizo a las madres a amamantar en público.
Muchas veces pienso que si se mirara menos a las tetas, habría menos problema ya que ni siquiera se darían cuenta de que estamos dando el pecho. s que aquellas madres que habitualmente dan el pecho en público son admirablemente discretas.
Recordemos que la Organización Mundial de la Salud recomienda la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses. Durante los primeros meses de vida, los bebés maman cada dos o tres horas aproximadamente. Si limitamos dar el pecho al ámbito privado, las mujeres permaneceríamos seis meses encerradas en casa o a la carrera para poder estar cada dos horas en casa o en una de las escasas salas de lactancia habilitadas en sitios públicos.
Como reflexión final os invito a ver, si todavía no lo habéis hecho, un vídeo viral de la croata, residente en Estados Unidos, Kristina Kuzmic, de 36 años y madre de tres hijos. En él exponía en tono irónico 4 razones por las que las mujeres nunca deberían dar el pecho en público. Lleva más de tres millones de reproducciones.