El Banco Central Europeo comentaba en su último boletín que el crecimiento de los salarios en la zona euro está en mínimos pese a la caída de las tasas de desempleo.
Económicamente hablando, si la tasa de desempleo baja, se incrementan los salarios, pero como ya hemos comentado, vivimos tiempos inciertos en los que incluso el propio Banco Central Europeo admite su incapacidad para acertar en las previsiones sobre tasas de desempleo y salarios durante los tres últimos años.
Trabajo a cualquier precio
Sigue existiendo una alta tasa de paro en muchos de los países de la zona euro, el nuestro entre ellos. Y sigue habiendo mucha gente buscando un trabajo desde hace mucho tiempo, por lo que todavía estamos en la fase de que cualquier trabajo es bueno mientras paguen.
Dejar de buscar hasta que el mercado laboral mejore
Al tener este panorama en el mercado laboral, muchos jóvenes optaron por seguir formándose ya no como una manera opcional, sino como algo necesario para obtener el próximo trabajo. También hemos vistos otros casos como reajustes en las familias para cuidar hijos en vez de pagar a terceros al salir más caro el cuidador externo que quedarse en casa cuidando a los hijos.
El mercado laboral se ha ido precarizando con la crisis y con la reforma laboral, imponiendo una flexibilidad no deseada en muchos casos, remuneraciones más bajas y en general peores condiciones laborales.
Por lo que aunque las cifras de desempleo bajen, no reflejan realmente una bajada real, ya que muchas personas están trabajando a tiempo parcial de forma “obligatoria” para al menos mantener un puesto de trabajo, otros han dejado de buscar y otros se han incorporado a las dinámicas del hogar y cuidados de hijos o mayores.
Tipos de trabajo
Los empleos bien pagados para los que se necesita un nivel medio de cualificación se han ido reduciendo en las décadas pasadas hasta ahora debido en su mayoría al aumento de la automatización y deslocalización de los mercados. Esto hace que este tipo de empleos tenga una retribución menor, del mismo modo que aumenta la oferta de personas con la cualificación necesaria para ejercerlo, por lo que ninguno de estos factores contribuye a la subida de salarios.
Además, la creación de empleo desde 2013 se concentra en servicios con menores niveles de productividad, no en sectores de alto valor añadido donde el margen es mayor y por lo tanto son posibles mayores salarios.
Otros factores
La bajada de la inflación tampoco contribuye a la subida de salarios, ya que es otra de las palancas que permiten negociar el salario para que éste no pierda valor o poder de compra. Por lo tanto, los trabajadores no tienen este argumento para reclamar salarios mayores como cuando la inflación es mayor.
También, la caída del número de afiliados a sindicatos y en particular de empleados cualificados, debilita el poder de negociación de trabajadores menos cualificados, los sindicatos pierden peso y como resultado no se tiene la capacidad de pactar mejores bases salariales, mayores salarios y mejores beneficios.
Igualdad de salarios y brecha salarial
Leemos en el último informe “Diferencias Retributivas de Género 2016” del Observatorio Salarial (EADA Business School Barcelona y grupo ICSA) que la recuperación económica no genera mayor igualdad entre géneros, sino más bien lo contrario.
Aunque la brecha salarial es menor en trabajos de menor nivel de responsabilidad, la presencia de mujeres en puestos directivos ha bajado de un 20% a un 12% actual desde el 2008 y las diferencias entre los sueldos de ellos y ellas es de un 17% a favor de los directivos.
La crisis ha devuelto a las empresas el control, la rigidez y la disponibilidad absoluta, con lo que la mujer pierde ya que no hay lugar ni para la conciliación ni para la flexibilidad.
Opinon pública
Vimos hace unos días cómo Robin Wright, actriz que saltó a la fama por su papel de Jenny en “Forrest Gump” y más recientemente por su papel en “House of Cards”, tuvo que pedir que la pagasen lo mismo que a su compañero de reparto Kevin Spacey en esta serie.
Aprovechando que su personaje era igual o más popular que el de su compañero de reparto y que los niveles de exigencia y trabajo eran los mismos pudo negociar, no sin antes amenazar con hacer pública esta diferencia de salario.
Este tipo de actos de personajes públicos se hacen cada vez más necesarios para reclamar la desaparición de la brecha salarial por trabajos en las mismas condiciones en los que sólo cambia el género de la persona que los realiza.
Fuentes:
http://www.icsarrhh.com/index.php?op=contenido382
http://www.huffingtonpost.es/2016/05/18/wright-igualdad-salarial_n_10020134.html?ir=Spain
Tan inspirador…. me veo reflejada en muchos de edtos datos, yo misma soy Protagonista de muchos de ellos… es una pena pero te quedas sin trabajo y al final es una suerte: no podria asumir el coste de una guarderia de 8 de la mañana a 10 de la noche. Al final es el mercado el qie te empuja a ser creativo y buscar otras opciones
Menos mal que no tienes dinero para pagar una guardería de 8 de la mañana a 10 de la noche. Si no, ¡pobre criatura, 14 horas fuera de su casa! 😉
Creo que te gustará el testimonio de nuestra colaboradora Ángeles Guisado, colega de profesión http://mamiconcilia.com/entoncesno-te-planteas-volver-a-buscar-trabajo-angeles-guisado/