“Ya está bien” es un decálogo contra la violencia sobre la mujer, diez frases sobre las bondades del amor frente a las desdichas de la dominación, escritas por magistrado Enrique Ortolá, titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Valencia, e ilustradas de forma atractiva por Miguel Chordá.
En el prólogo, firmado por Ortolá y la psicóloga Wanda Cogollos, se explica que “Ya está bien” es la frase repetida por muchas víctimas de la violencia de género cuando deciden salir de la situación de sumisión y discriminación que viven en su entorno privado. Este camino no siempre es fácil.
Con este documento, el Consejo General del Poder Judicial y el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género con sede en el órgano de gobierno, quieren acercarse a las víctimas y recordarles que nuestro sistema legal fija los mecanismos para ayudar y protegerlas, pero es imprescindible su colaboración en cada fase del proceso. El proceso empieza con una llamada al 016. El artículo 24 del Convenio del Consejo de Europa sobre la prevención y lucha contra la violencia contra la mujer y la violencia doméstica establece guardias telefónicas 24/7 para que las personas que llamen puedan recibir ayuda confidencialmente y si lo desean en el anonimato.
Difusión de “Ya está bien”
El Consejo General del Poder Judicial ha editado 20.000 ejemplares de “Ya está bien”, que se distribuirán en los Juzgados exclusivos de Violencia sobre la Mujer y en el resto de los órganos judiciales con competencias en esta materia. También se utilizará en el programa “Educando en Justicia”, orientado a acercar la Justicia a los más jóvenes mediante actividades en los centros educativos.
Además las instituciones que forma parte del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género (Consejo General del Poder Judicial, Ministerios de Justicia, de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y del Interior, la Fiscalía General del Estado, las Comunidades Autónomas con competencias en materia de justicia, el Consejo General de la Abogacía Española y el Consejo General de Procuradores de España) lo incluirán en sus webs para que llegue a más gente y la Fiscalía Especial contra la Violencia sobre la Mujer se lo remitirá al resto de Fiscalías.
Nosotros hemos querido sumarnos a la difusión de este documento, que nos llegó por correo electrónico a través de Bea Cobo, una de las coautoras de #mamiconcilia especial lactancia.
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Buenos días, Usue,
Leo con asiduidad los artículos de esta web, pues creo q abren el camino adecuado a como se deberá entender el binomio trabajo laboral con «trabajo» filiar. Uno de los puntos principales de cambio es la participación paterna en la dedicación a los menores, en IGUALDAD con aquella materna, binomio q si no funciona o se desequilibra, el fracaso está asegurado.
Sin embargo, se habla nuevamente del tema de la violencia sobre la mujer, obviando otras violencias igualmente dañinas (padres/madres a hijos y viceversa, hijos a abuelos, e incluso mujeres a su pareja) cuyos datos te podrían sorprender. Quiero decirte q este asunto de la violencia contra la mujer es un tema político (hay muchas subvenciones e intereses en juego) y q, a mi como padre, me produce una profunda repulsa (se llevan mas de 10 años de fracaso de las leyes de violencia contra la mujer); con esto, no (me) sumais, espantais. Para muestra, recientemente, en el Colegio de mi hijo, se dio una charla al respecto de la ley de violencia, impartida por GC, q consiguió q todos los niños (q no niñas) se manifiestan en algarabia frente a la discriminación q eso suponía… y son solo niños de 10 años q son libres y piensan. Yo, q soy mayor y educo a mis hijos, os digo q con esas leyes, y su MAL USO, estáis generando «odio». Una pena q mezcleis conciliación con violencia.
Hola Jose.
Gracias por tu comentario y por aportar tu punto de vista. Entiendo tu malestar contra la ley y no tanto tu desacuerdo con este post. Nos hemos limitado a dar difusión a un pdf que nos parece que puede ser útil para las víctimas de la violencia de género (mujeres en este caso). Demasiadas, porque una ya es demasiado. Y con esto no justifico ni oculto otros tipos de violencia.
Y estoy de acuerdo contigo (que entiendo que es el fin último de este comentario queja) en que la ley debería ofrecer soluciones a la violencia iguales para todos, independientemente del sexo de la víctima y del agresor o la agresora, cosa que actualmente no sucede.