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Reflexiones sobre la jornada laboral

La crisis de la que parece que estamos saliendo ha hecho que la jornada laboral y su duración haya pasado a la cola de las preocupaciones del trabajador: “por lo menos tienes trabajo”, nos decimos los unos a los otros mientras nos encogemos de hombros.

Los puestos de trabajo más precarios, las reformas laborales a favor de la empresa y la temporalidad son los temas que más nos preocupan actualmente.

Aunque estemos en Europa, en España todavía no disfrutamos de una jornada laboral en la que se sale de trabajar a las cinco de la tarde y poder conciliar con la familia o con tu propia vida.

El tipo de jornadas laborales más habituales en España son de 9 a 14, parón de dos horas para comer y vuelta desde las 16 hasta las 19:30… Si trabajas lejos de casa, suma al menos una hora de ida y otra de vuelta, con lo que en total estás al menos 12 horas fuera de casa.

Las reuniones fuera de horarios, las comidas y cenas de trabajo, las entregas de trabajos para ayer, la mala organización, el presentismo… acarrean baja productividad, menos tiempo para la vida personal, menos tiempo para descansar, menos tiempo para tareas del hogar, para hobbies, para hacer deporte, para desconectar… en fin, para ser tú.

Según cifras del INE relativas a 2014 sobre condiciones de trabajo, el 34,6% de los españoles que trabajan por cuenta ajena lo hacen con jornada laboral partida y el 64,8% con jornada laboral continua. Pero estas cifras incluyen dentro de la jornada intensiva a funcionarios, trabajos a tiempo parcial, jornadas reducidas y empleos por turnos, por lo que realmente no hay forma de llegar a saber cuántos empleados de empresas y con trabajo a tiempo completo tienen cada tipo de jornada.

Para añadir la puntilla, vivimos en un huso horario diferente al del resto de países europeos vecinos (desde 1942 España adoptó el huso horario de Europa Central en vez del de nuestros países vecinos) que hace que nuestra hora solar no se corresponda con la hora oficial y hace que nuestras costumbres se vean alteradas.

En otros países, como por ejemplo Suecia, se está haciendo un experimento de reducir la jornada laboral a 6 horas: empezando en el ayuntamiento de Gotteborg, se pretende ver la eficacia de esta jornada para que los empleados estén más motivados y sean mucho más productivos en esas 6 horas de lo que son actualmente con una jornada normal, y lo más importante… sin reducción de sueldo.

Si se demuestra que en esas 6 horas el trabajador es más productivo ¿creéis que en España se empezará a plantear alguna empresa implantar este tipo de jornada? La verdad es que no lo creo, y eso que actualmente en España hay ejemplos como el de Iberdrola, que lleva desde el 2008 con una jornada intensiva de 7:15 a 14:50 con la cual han mejorado la productividad, han ganado más de medio millón de horas de trabajo anuales, han reducido un 20% el absentismo y un 15% los accidentes laborales. Si estas cifras no mueven al resto de empresas españolas… ¿qué lo hará?

Es cierto que existen casos como EEUU o Japón en los que la jornada laboral es más salvaje. Por ejemplo en Japón, al ser el plano de la persona secundario y pagarse todas las horas extras como 1,5 horas de la jornada laboral, las jornadas suelen ser de 13,5 horas de media y se trabaja 6 días a la semana. La verdad es que las condiciones son muy diferentes, es un mercado en el que la mujer no se ha incorporado al igual que el hombre al mercado de trabajo y, por otro lado, la presión inmobiliaria es mucho mayor, con lo que todo el salario extra que se acumula haciendo horas extra es necesario.

Viendo el panorama y sin poder aspirar a muchos de los eternamente copados puestos “de arriba”, las nuevas generaciones (generación X, Y, y como quieran etiquetarnos) están viendo en el emprendimiento una nueva forma de “salir a flote”, es decir, de conciliar consigo mismo, con su desarrollo profesional y sentirse capaces de sentirse realizados.

De la jornada laboral a un nuevo modo de vida

Desde aquí, en mamiconcilia, hablamos tanto de medidas de flexibilidad en la jornada laboral como de teletrabajo para poder conciliar la vida personal y familiar con la laboral y que el individuo pueda desarrollarse en todos los planos, creemos que el gobierno tiene mucho que hacer, pero que la mayoría de los empleos están en manos de la empresa privada y como tal, ésta es la que tiene que cambiar el paso para cuidar al trabajador y así que en las crisis que puedan venir, el trabajador tenga motivos para ser leal a la empresa, arrimar el hombro y mantener, si no sacar a flote, la empresa en la que ha desarrollado su carrera.

Os dejo con un vídeo de Stu, un trabajador que aceptó un trabajo en Japón en “temporada alta”, donde el balance son 80 horas trabajadas vs 35 horas durmiendo. Situ se declara feliz sabiendo que este modelo de semana se repetiría al menos por 3 meses. La verdad es que esto no es apto para todos los públicos.


 
Fuentes:
http://www.goteborgdaily.se/proposal-to-trial-six-hour-workday
http://politica.elpais.com/politica/2014/12/26/actualidad/1419616033_794119.html

¿Serías capaz de trabajar 80 horas semanales? Esta es la jornada laboral de algunos japoneses


 

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